Manna, Arcadia, Grecia
Credits: Architectural & Interior Design: K-Studio
Technical Design: Monogon & CS Architecture
Photos by Ana Santl
Technical Design: Monogon & CS Architecture
Photos by Ana Santl
Destino en sí mismo o lugar mágico en el que hacer un alto en el camino hacia o desde Atenas, el hotel de cinco estrellas Manna ofrece a sus huéspedes la experiencia inigualable de sumergirse completamente en el encanto de los bosques de Arcadia, a 1200 metros de altitud. El imponente edificio que lo alberga fue construido a finales de los años veinte por un arquitecto suizo siguiendo los cánones, entonces en boga, del neoclasicismo. Utilizado durante dos décadas como sanatorio, fue abandonado y se convirtió en una valiosa mina materiales de construcción, que se reutilizaron en los pueblos de los alrededores. Su actual propietario, que de niño veraneaba en esa remota zona del Peloponeso, siempre había soñado con verlo renacer. Le acompañaron en la realización de ese sueño los arquitectos e interioristas de K-Studio, autores de un proyecto de rehabilitación que mantiene intacto el espíritu original del edificio y lo reinventa con un lenguaje estilístico que fusiona a la perfección pasado y presente. Imaginado como un oasis dedicado al bienestar del cuerpo y la mente, esta joya de la hostelería sorprende por la extraordinaria coherencia formal y cromática de su diseño interior: las superficies y el mobiliario de color blanco arena y madera natural crean una atmósfera refinada que invita a la relajación y a una profunda conexión con la exuberancia de la naturaleza circundante. Desde las zonas comunes, la experiencia de bienestar se extiende a los dormitorios y cuartos de baño, que también se caracterizan por los tonos neutros y una gran ligereza formal. Aquí, la tarea de mimar los sentidos se confía a la envolvente silueta de la bañera de hierro fundido Ambra, cuya superficie exterior está recubierta de una preciosa lámina de cobre antiguo trabajado a mano.
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